Pero resulta fácil atacar al gobierno. Es fácil ver el fallo en el otro. No es fácil ponerse en su lugar. Lo que manda es la bronca, la acritud en el ambiente. Lo que se dice y se envía por las redes, sobre todo, es irrespirable. Dan ganas de emigrar. Hay una pugna feroz a ver quién da más fuerte, como en esos punching ball de feria. Para mí ha sido demoledor leer en un grupo de Wup de gente culta, acostumbrada a opinar públicamente, que alguien hiciera chiste comparando a los socialistas con las ratas. Cuando le llamo la atención, dice que no está dispuesto a autocensurase. Mas adelante, cuando hace otro chiste sobre bueyes, desliza el chistecito de que no vaya alguno a ofenderse. Parece que el problema es tener la piel fina ante estas barbaridades. En otro foro, cuando uno critica agriamente al gobierno, otro le responde hablando de Aznar y la guerra del golfo. Todo son conductas criminales, una atribución al adversario de las perores intenciones, un rasgarse las vestiduras, un "y tú más". Parece un partido de tenis a pelotazos, cada uno en su campo. Nada nuevo, nada que no hayamos visto. Lo mismo de siempre, sí, solo que para una situación que requeriría un corte, otra manera, algo distinto.
domingo, abril 05, 2020
Diario de un confinamiento XVIII
Pero resulta fácil atacar al gobierno. Es fácil ver el fallo en el otro. No es fácil ponerse en su lugar. Lo que manda es la bronca, la acritud en el ambiente. Lo que se dice y se envía por las redes, sobre todo, es irrespirable. Dan ganas de emigrar. Hay una pugna feroz a ver quién da más fuerte, como en esos punching ball de feria. Para mí ha sido demoledor leer en un grupo de Wup de gente culta, acostumbrada a opinar públicamente, que alguien hiciera chiste comparando a los socialistas con las ratas. Cuando le llamo la atención, dice que no está dispuesto a autocensurase. Mas adelante, cuando hace otro chiste sobre bueyes, desliza el chistecito de que no vaya alguno a ofenderse. Parece que el problema es tener la piel fina ante estas barbaridades. En otro foro, cuando uno critica agriamente al gobierno, otro le responde hablando de Aznar y la guerra del golfo. Todo son conductas criminales, una atribución al adversario de las perores intenciones, un rasgarse las vestiduras, un "y tú más". Parece un partido de tenis a pelotazos, cada uno en su campo. Nada nuevo, nada que no hayamos visto. Lo mismo de siempre, sí, solo que para una situación que requeriría un corte, otra manera, algo distinto.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario